Como dice la canción, es la hora del adiós. Hasta aquí hemos llegado todos, los chicos, yo (que, definitivamente ya he escrito todo lo que quería escribir de Qhuinn y Blay porque es lo que me gustaría leer de ellos) y también vosotras. Sip, soy pesada, pero voy a decirlo una vez más: GRACIAS POR ACOMPAÑARME EN ESTE VIAJE. Gracias por darme ánimos para seguir escribiendo el capítulo siguiente, por hacerme reír como idiota y por sacarme los colores. Han sido 1.051 páginas que, lo juro, a veces creí que me chuparían la sangre y el cerebro. He intentado poner el mismo mimo en cada escena, me apeteciera escribirla en ese momento o no, fuera corta o larga, y hacerlo lo mejor que he sabido. No sé qué acabará haciendo la Ward con Qhuinn y Blay pero, bueno, personalmente ya puedo dormir tranquila. ¡¡¡Al menos en un fic han acabado como quería!! *guiño*
Cuando empecé a escribir esta historia tenía varios objetivos en mente, que os dejo a vosotras juzgar si se han cumplido o no. ¿Me dejáis repasarlos? (Ojo que aquí empieza la parte del rollo de examen de conciencia):
- Quería «abrir el foco», es decir, recorrer diferentes situaciones y diversos emplazamientos. Porque no sé a vosotras, pero a mí ir del callejón tres mil millones a la calle Trade y al Commodore se me empieza a quedar muuuuy pequeño. Porque las situaciones que se crean y el lenguaje que se usa acaba siendo el mismo. Por eso diseñé la ciudad y por eso intenté que los personajes fueran a cafés, discos gays, comisarías de policía, despachos de abogados, salones de té, reuniones nobiliarias y cenas en familia. Porque la vida real es diversa.
- Muerte a la casualidad. He intentado que nada ocurra «porque sí», sino que las cosas vengan de un sitio. Uno no va por la calle y plop, le sale un restrictor. Ese restrictor estaría ahí por algo, ¿no? Seguramente tendría una cosa que se llama «motivo». Y así sucesivamente. Lo cual me obligó a tener una trama en desarrollo desde la página 1, no a ir escribiendo según se me fuera iluminando la bombilla. Joderrrrrr, qué trabajito dio la maldita trama.
- La táctica militar existe (y el mundo armamentístico va más allá de la Sig, la Glock y las dagas. Lo juro por Snoopy). También he intentado mostrar a los Hermanos como lo que se suponen que son: militares de alto grado, los comandos especiales, los SEAL mezclados con los SWAT. O sea, para ir de un punto A a otro B son capaces de pensar en una estrategia que no necesariamente sea una línea recta. Y también pueden comprar chismes que les ayuden en la guerra. Vamos, que lo de ir con puños americanos y entrar en una colonia sympath por la puta puerta me pone de los nervios.
- La gente tiene una historia detrás. De verdad. Incluso los malos han tenido que haber salido de algún sitio. Intenté darles aunque fuera una mínima historia vital a Jay-O, Carlos y Felipe. Y trazar un mínimo perfil psicológico para Eckle: ¿por que odia a Qhuinn? Porque, al nacer «defectuoso», la presión sobre él como único heredero viable alcanzó cotas tremendas para un niño. A Eckle le robaron la infancia mientras veía que Qhuinn se pasaba el día jugando tranquilamente. Por supuesto, Eckle no veía todo el retrato del asunto y nada excusa que quisiera matar a un hermano, pero intenté darle un «por qué» que se entendiera.
En fin, vosotras diréis si lo conseguí o no. Como estamos al final, también aprovecharé para decir de lo que estoy moderamente satisfecha de historia. Moderadamente, porque todo en esta vida es mejorable. ¡¡Yupi, ya no mezclo puntos de vista de los personajes en una misma escena!!! Bien por mí^^; No aprendí a hacerlo hasta la mitad de AR, así que AL es el primer fic donde cada escena se ve sólo a través de un par de ojos. Algo es algo. También me siento pelín satisfecha de haber podido diseñar una trama para el fic. No me gustan esas historias que la autora no sabe cómo van a acabar o qué va a ocurrir en el capi siguiente. Creo que, para que sea coherente, una historia ha de tener principio, desarrollo y final. No sé si la trama de este fic ha sido entretenida o no pero, hey, ¡¡tenía una trama!! Eso cuenta, ¿no?
Por otra parte, también tengo mis espinitas clavadas. Sip. Lash es la mayor de ellas. Mira que le di vueltas a cómo «humanizarle», cómo conseguir algo similar a lo de Eckle. Encontrar ese resorte que nos ayude a entender por qué es más malo que la tiña, por qué se comporta como lo hace. Hallar esa cosita que, aun siendo malo, nos haga ver su lado humano o real. He fallado miserablemente. Hasta donde soy capaz de llegar, Lash es malo porque es malo. Y disfruta siéndolo. No tiene grises, es negro absoluto. Lo cual lo convierte en aburridísimo de llevar, la verdad. Y además es un malo tonto del culo porque, afrontémoslo, los planes que hace en los libros son más grandilocuentes que inteligentes y siempre se le van a la mierda por su ego. Es un cansancio de tipo pero al menos lo he matado con sangre, sudor y lágrimas. Nada de una daguita en el corazón y adiós, gracias por participar.
Lo de la concreción también me tiene sacando humo de las orejas. Vale que en este fic pasan muchas cosas pero… ¿mil y pico páginas? Tiene que haber una forma de explicar lo mismo con menos palabras. Seguro. Fijo. Pero es como el Santo Grial: a mí se me escapa. Algún día lo encontraré, imagino, o me denunciarán por desforestar la Tierra.
Ahora me concentraré en Amantes Prohibidos, el fic VUTCH roleado que tengo entre manos y, cuando mis hemisferios mentales conecte de nuevo para escribir algo que supere las diez páginas, en el prometido trío VxRhagexButch. También me pondré a editar este Amantes Liberados: sustituir guiones cortos por largos, sangrías, palabras repetidas, distribución del texto en capítulos racionales… Cuando lo tenga (dadme unos meses) lo colgaré como AR: editado como un libro, con su portada y toda la pesca.
Pues ahora sí, hasta aquí hemos llegado. Como dice el megafantabulosohíperchachiguay montaje que también se ha currado Vishous Esencia *baaaaaaaaabas*… FIN.